Según el informe, publicado en la revista Comercio Exterior, entre 2020 y 2023 en la capital cruceña se erigieron más de 50 edificios de 10 pisos o más, superando al momento los 260, en total.
Cuando el dólar escasea y sube de precio en Bolivia, el comprar una casa o un departamento es una buena alternativa por la ganancia de plusvalía en el tiempo», señaló el gerente General del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, quien asegura que la inversión en bienes raíces en el departamento de Santa Cruz es un negocio seguro.
En los últimos 20 años, Santa Cruz ha experimentado un ciclo inmobiliario marcado por oportunidades y desafíos propios del crecimiento acelerado. Se ha observado un rápido desarrollo urbano con el fenómeno de la conurbación, impulsándonos hacia la condición de metrópolis, junto a una densificación notable reflejada en la construcción de torres equiparables a otras capitales latinoamericanas.
A pesar de los desafíos planteados por la pandemia y la compleja coyuntura económica nacional, el sector inmobiliario de Santa Cruz ha demostrado resiliencia. Los indicadores muestran un aumento en la inversión en propiedades, una disminución en la desocupación de edificios y un incremento en las ventas.
Entre 2020 y 2023, se erigieron 51 edificios de 10 pisos o más, totalizando 261 en la actualidad. Con un mercado en proceso de recuperación, se reconoce que el bien inmueble representa la mejor alternativa para convertir la moneda boliviana en activos tangibles.
El experto en la materia, Julio César Valenzuela, sostiene que el significativo crecimiento poblacional de la ciudad se traduce en una sólida demanda de alquileres, garantizando un retorno y una plusvalía segura para las inversiones. Santa Cruz ofrece un emocionante panorama para los inversores inmobiliarios, que, con datos, análisis y su optimismo inquebrantable, guiarán el futuro de la capital cruceña.
